La Santísima Virgen llegó a la parroquia sobre las 20:45 h. arropada por los fieles y devotos de la ciudad y esperándola en el dintel de la Castrense se encontraba el párroco de la misma, D. Gonzalo Núñez del Castillo, junto a todas las realidades parroquiales y feligresía.
La Virgen del Carmen permaneció en el templo franciscano hasta las 21.00 h. del 21 de junio, en el que fue despedida tras la celebración de la Eucaristía en su honor.
En esa jornada se dedicaron en la parroquia diversos actos y cultos a la patrona de la ciudad y de la Armada.