El viaje del grupo del arzobispado castrense hacia Cracovia continúa sin mayores percances, el siguiente paso del camino, que les acerca al encuentro de jóvenes de todo el mundo con el papa, ha sido el desplazamiento de Burdeos a Lyon. El día comenzó con la eucaristía, en la que ofrecieron su jornada a Dios con la oración más perfecta de la Iglesia, tras esta, tuvo lugar la recogida para retomar el camino. El recorrido, aunque más corto que el de ayer, también ofreció un amplio margen para diversidad de actividades, desde momentos más solemnes como el rezo de los salmos de la mañana hasta algunos más distendidos con cantos o el visionado de una película. Una vez llegados a Lyon, los peregrinos tuvieron la tarde para conocer y disfrutar de esta hermosa ciudad medieval de la región de Auvernia-Ródano-Alpes de Francia, situada entre los Alpes y el Macizo Central. Entre todas las bellezas que ofrece esta ciudad se encuentran la Catedral de San Juan, la Basílica de Notrê Dame de Fourviere o las distintas ruinas romanas como el Circo o los teatros. El paso por esta ciudad ha permitido que los peregrinos se vayan preparando poco a poco para lo que les espera en Cracovia, el ambiente de confianza crece según va avanzando la peregrinación. Tras Lyon los peregrinos marcharán a la frontera con Alemania, a Estrasburgo.

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